Aprovechando la oportunidad que representa el bajo retorno que ofrecen los depósitos, otro tipo de empresas ha empezado a competir con los bancos en un intento de captar su negocio y su clientela. Las compañías de telecomunicaciones y las startups financieras tienen sus propias ofertas para atraer el ahorro de clientes descontentos con las rentabilidades o con el funcionamiento de las entidades tradicionales.
El pasado mes de noviembre, Orange eligió España como el segundo país del mundo en el que introducir Orange Bank, su banco móvil creado en Francia en 2017. Las empresas del sector de las telecomunicaciones tratan de ofrecer servicios adicionales a sus clientes, con los que mantienen un contacto directo y cercano, para ganar ingresos procedentes de otras fuentes.
Las fintech también luchan por obtener depósitos, poniendo a disposición del pequeño cliente la posibilidad de ahorrar o de invertir mejor debido a que ofrecen una mayor variedad de oferta de productos y unos menores costes. Las aplicaciones de ‘fintech’ pretenden modernizar la banca permitiendo hacer cualquier gestión desde el móvil, con ‘apps’ sencillas e intuitivas. Según Asier Uribe, director general de Finanbest, ellos buscan y seleccionan los mejores productos del mercado, y debido a que ahorran costes al hacer sólo distribución digital, les permite elevar la rentabilidad. Con todo, la evolución del sector está siendo muy lenta, ya que la población no conoce las fintech.
Por su parte, las grandes tecnológicas como Google, Amazon o Facebook también se están acercando al sector financiero, aunque desde una perspectiva distinta; las ‘big tech’ van a atacar por el lado de la masa de usuarios. Google tiene 2.000 millones de usuarios, cuando el banco que más tiene cuenta con aproximadamente una cuarta parte. Creemos firmemente en asociarnos con bancos, instituciones financieras y Gobiernos de todo el mundo para poder desarrollar un sistema financiero equitativo y que satisfaga las necesidades cambiantes de una nueva generación de clientes, comentan desde Google.
Fuente: Cinco Días (Diciembre 2019)